TURISMO EN LA ESTACION DE OSPINO DEL EDO PORTUGUESA

La Estación de Ospino, ubicada aproximadamente a 13 Kms. Por vía asfaltada de la población de Ospino, cuenta con muchos escenarios naturales y valores humanos propicios para desarrollar el turismo alternativo en la región. También es sinónimo de hospitalidad, familiaridad y gente trabajadora. Según la historia, los viajeros que iban o venía del Estado Lara, allí estacionaban y por ende sus pobladores con esa herencia de atender al visitante foráneo le hacen honor a su nombre. Emprendemos el viaje, organizamos una ruta para descubrir esta maravillosa parroquia del pie de monte andino. Comenzando por la visita a la casa del señor Otilio Rodríguez, tallador de madera y músico, nacido de esta tierra hermosa, el 13-12-1944 comenzó con la elaboración de trompos, cuatros y violines de madera. Ya más adulto, fue conocido entre su comunidad como serenatero de la época de navidad, hasta que fundó un grupo de violines llamado “Los Rosales”. Actualmente, trabaja con cualquier tipo de madera, en especial Jabillo, Cedro y Caoba. Pues, el ha logrado como artista popular comprender la perfecta sincronía entre el hombre y la madera. Autor, de muchos tallados, entre ellos el aspecto religioso como el cristo entre las cayenas, el nazareno, la aparición de la virgen de coromoto, y muchos otros no religiosos como: la Kodúa, instrumentos musicales, el violinista y la ballena. Nuestra segunda visita, la hacemos al maestro jubilado, Simeón Rivas, tallador de madera, nació en Libertad de Barinas, el 16-04-1940, ha vivido por más de 30 años, en estas tierras que le dieron cobijo, ha sido director de núcleo escolar y secretario de cámara municipal de Ospino, desde muy joven siempre le interesó y se preocupó por dar a conocer personajes importantes en nuestra historia venezolana, y por ello ha recibido más de 60 reconocimientos por su larga trayectoria, otorgadas por instituciones públicas nacionales y locales. Le gusta trabajar con maderas suaves como el Cedro y la Caoba. Esté personaje representa otro estilo con un acabado muy delicado, entre sus obras podemos observar a nuestro Libertador Simón Bolívar, Antonio José de Sucre, y un reciente desnudo de nombre herminia. En una tercera visita, en la casa del joven artesano Juan Edelio Jimenez, tenemos la oportunidad de apreciar y comprar artesanías de recuerdo de diferentes formas y tonalidades, con colores que van desde el blanco, pasando por el gris, la naranja hasta los más oscuros. Que por excelente calidad nada tienen que envidiarle al vecino estado Lara. Luego de nutrirnos culturalmente, nos dirigimos al balneario de la Estación, cuyas aguas del río Ospino nos invitan a refrescarnos, para disfrutar de este hermoso paisaje natural, y de ser posible pernoctar en campamentos, puesto que allí existen instalaciones físicas para pasar todo un fin de semana con grupos educativos o en familia, con un ambiente “siempre verde”, típico de bosques húmedos. En la última parada, ya de regreso a las afueras de la Estación de Ospino, decidimos realizar varias tomas fotográficas a un balneario denominado por los lugareños, como Borbollones, caracterizado por sus abruptas formaciones rocosas atravesadas por el Rio Ospino, nos da la impresión de estar sumergidos en una bañera de piedra, la cual puede ser burbujeante dependiendo de la época del año.