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viernes, 16 de enero de 2015

VISITA A LA ACADEMIA CIENCIAS AGRICOLA DE VENEZUELA (ACAV)

“VISITA A LA ACADEMIA DE CIENCIAS AGRICOLAS DE VENEZUELA (ACAV)” (Texto y fotos: Ken Alejandro Espinoza) Gracias a la invitación que me hizo la T.S.U. Erlin Canelón Coordinadora de la Red VIVA (vigilantes del ambiente) “Los Pioneros” del Municipio Sucre, para participar y ampliar mis conocimientos como “maestro campesino caficultor” en la Academia Ciencias Agrícolas de Venezuela (ACAV), la cual se encuentra ubicada en la zona alta del Municipio Sabaneta entre los embalses “Boconó – Tucupido” ( conocido como embalse “La Coromoto”) y el embalse “Masparro”, a lo cual se conformó un grupo de participantes provenientes del municipio Guanare, Municipio Sucre (con acompañamiento cubano para el desarrollo endógeno) y el Municipio Unda. Comenzamos el trayecto de más de 21 kilómetros de ascenso de montaña en forma de “S” con vialidad totalmente pavimentada, con infinidad de terrenos dedicados a la cría de Ganado, pasamos muchos caseríos y todos con viviendas dignas, durante el recorrido me sorprendió el observar a mi lado izquierdo, el color azul intenso del embalse “Masparro” y más adelante a mi lado derecho el imponente espejo de agua del embalse “Boconó-Tucupido”, seguíamos nuestro rumbo hasta que dejábamos una meseta en descenso leve, desde la cual divisábamos grandes extensiones de Palma Corozo que se perdían de nuestra vista hasta las estribaciones del Macizo de Guaramacal. Cada vez me preguntaba a mismo ¿que tendrá de especial el sitio a donde nos dirigimos que esta tan retirado de la ciudad?, sin más preámbulos a lo lejos se nos mostraba con galanteo la infraestructura del ACAV, al llegar, fuimos recibidos con mucho calor humano por su presidenta la Ing. Carmen Rodríguez y su Vice presidenta la Ing. Margelys Salazar, quienes nos explicaron lo relacionado con ese centro de investigación agrícola y a la vez casa de estudios. Luego, nos guió dentro de sus instalaciones el Lcdo. Reydi Camacho, Coordinador de Formación de ese centro, quien nos llevó al Laboratorio de Suelos, Laboratorio de Vinos, Laboratorio de Teledetección, al Laboratorio Acuícola y al Laboratorio de producción Apícola. Allí nos hicimos una idea más clara de la misión y visión de esta Academia de Ciencias Agrícolas, pues se investiga la factibilidad sobre la cría de cachamas en jaula en los embalses, el cultivo de musáceas como el plátano, el cultivo de pimentón en invernadero, el procesamiento y certificación industrial para la miel, asesoría técnica en el manejo del cultivo de café, el servicio a precio justo de los análisis de suelo, el estudio científico acerca de la problemática de la sedimentación de los embalses, y la formación de ingenieros en el área de agro alimentaria como casa de estudios. Mi experiencia como explorador innato me llevó a indagar acerca que motivo al presidente Hugo Chávez Frías que este proyecto fuera realidad en este sitio, pues el personal de dichas instalaciones me relataba que debía caminar más de cuatro (4) kilómetros para conocer a un personaje en el sector de “Quebrada Negra” apodado como “el hombre de la burra”, para que él con sus propias palabras me dijera el origen de la academia en ese lugar tan retirado. Allí el señor Felipe Betancourt, sin su apodo coloquial nos atendió junto a su familia, y me contó su experiencia el día 19-08-2006 cuando se disponía buscar leña junto a su burra, cuando siendo aprox. las 3:15 pm escucha el ruido del bramar de un helicóptero, y él se queda mirándolo fijamente con la certeza y la esperanza, que quien iba allí era el presidente Hugo Chávez, pues a este lugareño se le ocurrió hacerle señas con su sombrero de paja que bajara hasta donde él estaba, sintió cuando el helicóptero le pasó por encima, se detuvo unos segundos y siguió su rumbo hacia el horizonte, sorpresivamente el escucha que a lo lejos, el helicóptero retorna, y él se emociona tanto que le indicaba que aterrizara en un claro cerca de donde se encontraba, corrió apresurado con su burra, la cual amarró a una palma corozo, para esperar que aterrizara “ese aparato”, sorpresa para este señor que era el mismísimo presidente Chávez, quien se bajó y lo abrazó muy fuerte, pidiéndole “quiero cafecito”, ¿dónde hay? Lo llevó a un rancho cerca del sitio, se tomaron el cafecito y le preguntó viejo que quieres, y el respondió: yo lo que le voy a pedir es para mi pueblo, que está muy necesitado en vialidad, vivienda y educación. Durante su estadía llegaban más y más campesinos con mucha emoción y esperanza de cambio, les ofreció y les cumplió insertar ese sector agrícola en su proyecto del “buen vivir”, compartió junto a su pueblo durante horas; la niña Francis Betancourt de 14 años en aquel entonces, le pidió que la paseara por el embalse y contemplar el embalse desde las alturas, a lo cual le cumplió ese sueño, diciéndole “nunca abandones tus estudios para que puedas ser una mujer libre de cadenas y toda una profesional”. Para sus comentarios escriba a: coturima@gmail.com

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